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He terminado con mis 18 meses de permanencia y, claro está, lo que hay que hacer en este momento es ¿celebrarlo?, no, buscar otra razón para atarse otros 18 meses.

Al contrario que en otras ocasiones el móvil que tengo ha sobrevivido en muy buenas condiciones por lo que esta vez no hay ninguna prisa para cambiar (Samsung z170 bueno, samsung z170 bonito :-)). Aún así, como ya llevo tiempo retrasando la ardua tarea de investigar en el tormentoso mundo de las tarifas telefónicas para intentar reducir mi factura, he decidido hacer ambas cosas a la vez.

Ahora mismo mi habitación tiene un pequeño montículo con catálogos de The phonehouse, Orange, Redcom (Vodafone), Smol (Yoigo), etc, etc y el historial de mi ordenador tampoco deja lugar a dudas, desde las paginas de los operadores a todo cuanto foro de móviles existe.

Podría recitar de memoria lo que te estafa cobra cada compañía por minuto, tarifas planas, accesos a Internet, consumos mínimos, etc, etc, es una pena que no caiga en las oposiciones. Algunas tarifas son directamente un robo, en otras hace falta un doctorado en matemática aplicada a las ciencias tarifarias para comprobar si nos conviene o no y otras son tan simples y atrayentes que te pasan horas mirando para ellas y diciendo, donde esta el truco, tiene que haber truco, y sorpresa, casi siempre lo hay.

Todavía no he decidido que hacer pero hay varios móviles que me empujan directamente hacía una portabilidad y posterior permanencia.

Ya os contaré que decido al final y a que operador emigro para el próximo año y medio.

Hoy por momentos hacía mucho viento, pero el resto del tiempo el día acompañaba bastante para estar en la calle. He aprovechado la tarde para pasear por el centro entre los puestos de la Reconquista y después he ido a estudiar, primero al náutico y después, al comprobar que había muchísima gente, al mirador del paseo de Alfonso XII.

Nunca he sido mucho de ir a la biblioteca, aunque tendré que empezar a planteármelo porque ya me conozco demasiado mi habitación. Aún así mientras el tiempo acompañer seguiré escapándome de vez en cuando hasta el náutico, el castro, o alguno de los parque sde Vigo, porque estudiar con estas vistas es bastante más llevadero que hacerlo en casa apreciando cada bultito del gotelé de mi pared.

Os dejo un par de imágenes.

Mal pensados, que sois unos mal pensados.

Ayer vi Watchmen.

No sabía nada de Watchmen antes de ver la película y no se si me hubiese gustado en caso de haber sido un fiel seguidor de la historia. Pero, como no lo soy, solo puedo deciros que como película me gusto mucho, es distinta, la imagen, la ambientación, la música, los detalles reales que aparecen entremezclados con la ficción, etc..., bueno mejor no sigo escribiendo porque seguro que al final cuento algo que no debo.

Solo añadir que si esperáis una película tipo Spiderman o Superman olvidaos. Watchmen es más como El caballero oscuro, pero todavía mucho más oscura.

Me gustaría dejaros el vídeo de los fantásticos créditos iniciales de la película, pero desgraciadamente todos los vídeos que había visto colgados en internet han sido retirados por cuestiones de Copyright. Es una pena que las productoras no vean que esos vídeos no eran nada más que publicidad gratuita, porque nadie va a querer ver únicamente los créditos y, sobretodo, nadie va a decidir no ver la película solo por los créditos pero es muy posible que si hubiesen llevado gente a los cines al ver la calidad que tienen.

El fin de semana pasado estuve en Madrid y vi un curioso cartel en un Zara Lefties.

El cartel, como tambien ocurre con la distribución de sus tiendas, tambien demuestra a que sectores de la población dan más importancia en Inditex. Y si en las tiendas para comprar una camisa de caballero o de niño hay que subir a la tercera planta en este lefties hay que adivinar que tambien tiene ropa de Caballero y Niño en esa sección.

En todo caso esto no deja de ser un cartel bien hecho que ha ido perdiendo letras y por dejadez no se ha arreglado, pero lo que vi el Jueves en Valladolid es todavía peor.

El fallo de la carta de este restaurante, cuyo nombre por cierto trajo algo de cachondeo cuando decidimos entrar en él, pasaba a primera vista desapercibido pero en cuanto habías acabado de leerla había algo que te chirríaba. Y entonces descubrías lo que era.

No llega al nivel del famoso "spaghetti with beautiful" como traducción de "espaguetis con bonito" pero le llega bien.

Asisto cabreado a las continuas frases del PP Vasco y nacional sobre su "papel decisivo" en la formación de gobierno en el País Vasco.

Resulta ahora que quien siempre se ha quejado de que no gobierne la lista más votada, sino aquella que es capaz de reunir los apoyos parlamentarios necesarios, son los que ahora urgen la formación de un gobierno encabezado por la segunda fuerza más votada en las elecciones del Pais Vasco.

Resulta que aquellos que acusan de chantajistas a los nacionalistas y a los socialistas de dejarse chantajear por y para conseguir poder son los que ahora dicen ser "decisivos e imprescindibles" en la formación del gobierno vasco y se atreven incluso a hablar de la gobernabilidad de otras instituciones como pieza dentro del posible acuerdo para gobernar el País Vasco.

Por si esto no fuera suficientemente cabreante, el fin de semana pasado estuve en Madrid y como siempre que estoy hay una cosa que me sorprende.

El PP de Madrid, el que critica por sistema a los nacionalistas, el que despotrica lo impensable sobre el amor a las banderas de los nacionalistas (gallegos, vascos, etc.. nunca de los nacionalistas españoles) tiene Madrid sembrada de las estrellas de la bandera madrileña.

Cada esquina del metro, cada tapa de alcantarilla, cada autobús, etc, etc, tiene la bandera de Madrid impresa allí donde hay un hueco. Si en Galicia o en Cataluña se hiciese lo mismo, el PP estaría diciendo que se intenta imponer a los españoles la bandera de la comunidad y se esconde la de España.

Es verdad que en Madrid no faltan banderas de España en todos los edificios oficiales, incluida la bandera gigante de la plaza de Colon, pero no es menos verdad que en todos los servicios que he mencionado y en muchos otros utilizan la bandera madrileña hasta limites que en las comunidades históricas serían tachado de muestras de independentismo y afrentas a la únidad de la patría.

Por cierto, otra de las cosas que me cabrea cuando voy a Madrid es comprobar como tras criticar por activa y por pasiva la compra de un audi a8 como coche oficial blindado para el Presidente de la Xunta de Galicia el PP de Madrid sigue teniendo en dotación en el SAMUR vehiculos como los todoterreno BMW X5 que no son precisamente baratos y que podían ser perfectamente substituidos por otros todoterreno de menor precio e iguales o mejores prestaciones (el X5 no deja de ser un todocamino y no un todoterreno puro). También podríamos comprobar donde se fabrica el X5 aunque viendo que el señor Feijoo considera que el Citroen C6 se fabrica en Vigo toda respuesta es posible.

Como anecdota tambien me pregunto cual es la necesidad que cubren en el SAMUR los 10 URO VAMTAC con los que cuentan. ¿De verdad necesitamos un vehiculo militar prestando servicio de ambulancia? ¿No habría otros vehiculos menos pesados, más extendidos (y por lo tanto con repuestos más baratos) que cumplieran los requisitos todoterreno y de arrastre del SAMUR? ¿Porque camino de la sierra madrileña caben los 2,17 metros de ancho del VAMTAC?. En este caso no voy a afirmar que sobre porque la verdad es que no hay un substituto claro, aunque tengo serías dudas de su verdadera necesidad. Por lo menos en este caso si esta fabricado en España, concretamente en Santiago de Compostela.

Lo primero, aunque a veces se hagan chistes, los aviones de Ryanair no son, repito NO SON, trenes indios con alas. La gente va toda sentada, nadie se cuelga de las alas para pagar menos (aún), no te dejan llevarte las gallinas, o un cerdo de viaje, etc, etc. No es que se diga habitualmente esto de Ryanair pero, a veces, viendo lo que te cobran y como te quieren cobrar más hasta por ir al baño (aún no pero se lo están pensando) podríamos llegar a pensarlo.

Durante el viaje de Santiago a Madrid no hubo más de dos minutos sin que nos contasen algo por los altavoces o sin algún recorrido de los y las azafatas vendiéndonos algo. Que si ocupen cualquier asiento del avión para dejar subir al resto del pasaje (en Ryanair los asientos no están numerados), apaguen sus móviles y blackberrys (que no deben ser móviles por lo que parece), explicaciones de seguridad, comida a precios populares, colonias sin impuestos, artículos de duty free, lotería de Ryanair, muchos productos típicos de teletienda, etc.

Y no solo la gran cantidad de productos a la venta sino, sobretodo, las explicaciones del encargado de anunciar la venta.

“Tenemos en oferta la colonia xxx de yyy para hombre por 32,50€, hhh de yyy para mujer por 37,5, la colonia.... todo primeras marcas y sin impuestos.”

“Ha llegado el momento que llevaban semanas esperando. Nuestra compañera Rosana pasara por sus asientos con la lotería de Ryanair. Puede tocarles un millón de euros, pero si creen que ustedes no pueden tener tanta suerte también les puede tocar un coche. Y sino también...."

Así que ya sabéis, barato es, pero si el viaje es más largo que un simple Santiago - Madrid,os recomiendo incluir en el kit de viaje unos tapones, por si acaso.

Yo quede contento de la "experiencia", aunque para utilizar los servicios de Ryanair tenga que desplazarme a Santiago :-(.

Me salio bien de precio, sobretodo teniendo en cuenta el poquísimo tiempo con el que decidí marcharme (3 días), aún sumando el tren Santiago - Vigo y el autobús al aeropuerto [por suerte para el vuelo de ida a madrid me llevaron en coche :-)].

Por cierto, ¿os he dicho que me encanta volar?.

Pues si, me encanta, incluso con él tiempo que hacía en Santiago el día que despegamos, porque, para variar, llovía a cantaros.

Acabo de abrir el periodico y me he encontrado con esto.

Esta semana no he podido escribir nada.

Lo primeros días estaba algo hundido por el resultado de las elecciones (del que escribiré más adelante) y no encontre momento, el resto de la semana directamente no tuve ningúno y el fin de semana no he estado en Vigo.

He llegado hoy por la mañana y aunque tengo una buena lista de entradas que hacer: el cachondeo de volar en Ryanair, el nacionalismo madrileño, mis pensamientos sobre las elecciones, etc, lo que no tengo desgaciadamente es tiempo.

Mañana me marcho a Valladolid y volveré a Vigo el viernes o el domingo. Esta vez me llevo el portatil así que igual consigo robarle unos minutos al estudio para escribir.

Nos vemos.